Y que la felicadad no esta ni en el fin bien que buscamos, ni en los placeres, ni en las virtudes, ni el epnesamiento ni en aceptar nuestro destino. La felicdad está en disfrutar todo, está en esos momentos chiquitos o grandes donde somos felices y que no son eternos, porque si fuera eternos, dejarian de hacernos felices. Necesitamos llorar para reir, sufrir para alegrarnos, es así. Necesitamos esperar, para disfrutar; queremos algo ya, no hay que esperar, sino pierde la mágia pierde el encanto (obvio tampoco esperar una eternidad porque terminas buscando otra cosa pero si esperar).
Cuando te reís sin parar, como me paso hoy, que el aire ya no me daba para más, la panza me dolía y hasta estaba empezanod a llorar, eso es la felicidad, son esos momentos. Esa foto que nos scamos hoy y nos causo tanta gracia, la salida del pelle rancheando en socailes y riendonos sin parar, eso es la felicidad.
Y la risa, la risa es lo mejor qeu existe, ayuda a la felicidad por supuesto. De hecho es felicidad, no es felicidad ni concreta pero durante ese momento de risa, te olvidas de la no felicidad, pensas solo en eso graicoso, en tu risa y no pensas en nada más ytener en mente solamente tu risa eso tammbéin, es felicidad.
En conclusión, amo reirme y extrañaba hacerlo y en segunda conclusiíon Aristóteles era un idiota, aguante Annick J. Sharley.

Nuestro hermoso deber es imaginar que hay un laberinto y un hilo. Nunca daremos con el hilo; acaso lo encontramos y lo perdemos en un acto de fe, en una cadencia, en el sueño, en las palabras que se llaman filosofía o en la mera y sencilla felicidad.
J. L. Borges
J. L. Borges
miércoles, 30 de septiembre de 2009
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