Me estaba por ir a dormir postis, pero por una de esas casualidades de la vida, encontré un posteo del blog sobre "los dos nahueles" y así como de casualidad, de mis parlantes salía Siempre esperado (y yo sé que mañana nos puede tocar estar juntos o escapar por el mundoo, es mejor esperarte). Canción que me pasaste hace casi 3 años y que siempre me hizo acordar a vos. Pero en fin, el posteo ese a vos te había gustado, de hecho nos veíamos y me lo citabas. Sería que estabas de acuerdo, de acuerdo en que (conmigo ) habías sido dos personas distintas.
Por un lado tenemos al Nahuel, al que queremos, al que me escribía canciones mientras yo estaba en el cerro, al de las llamadas y los mensajes, al que me quería ver siempre y me regalaba chocolates. Y por el otro, al que nunca fue sincero, al que cancelaba los planes y tenía excusas absurdas.
Y que se yo, siempre voy a preferir recordar al primero, como para poder sonreir.

Nuestro hermoso deber es imaginar que hay un laberinto y un hilo. Nunca daremos con el hilo; acaso lo encontramos y lo perdemos en un acto de fe, en una cadencia, en el sueño, en las palabras que se llaman filosofía o en la mera y sencilla felicidad.
J. L. Borges
J. L. Borges
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